La vida cristiana está llena de muchos sucesos, momentos
lindos e incomparables, pero también experimentaremos momentos en donde el
panorama no pinta tan bien como quisiéramos.
Quizá en estos últimos días has sido testigo como de pronto
todo se puso oscuro, como las olas están azotando tu barca y como los vientos
fuertes tratan de derribarte.
Y es que pareciera que Jesús duerme mientras nosotros
estamos experimentando un panorama que realmente no pinta tan bien como
quisiéramos. ¿Te ha pasado?, ¿Has experimentado esos momentos en donde las
cosas no pintan tan bien y para sumarle a todo pareciera que Dios se ha
olvidado de nosotros o pareciera que está dormido, mientras nos escapamos a
hundir en la vida?
La verdad es que Dios en ningún momento se ha olvidado de ti
o de tus cosas, y a pesar de que aparentemente duerme, El siempre llega en el
momento justo, siempre estará allí cuando todo parece que se vendrá abajo,
porque Él es el dueño de los tiempos, jamás dejara que te hundas.
Y es que el panorama puede ser el peor, pero Jesús es experto
para transformar lo negativo en positivo, El puede hacer que esa dura tormenta
que está cayendo sobre tu vida, se calme, que aquellas olas que querían
hundirte, sean aguas mansas y que los vientos dejen de soplar en tu contra.
Así que no debemos desfallecer porque Él estará siempre para nosotros, para guiarnos y brindarnos su protección.